5° Domingo del Tiempo Ordinario, 7 de Febrero 2016, Ciclo C


San Lucas 5, 1 - 11

" Pesca Milagrosa"
  1. Jesús les Enseña Mar Adentro: Pedro es un hombre de fe, seducido por Jesús. Sus palabras tienen para él más fuerza que su propia experiencia. Pedro sabe que nadie se pone a pescar al mediodía en el lago, sobre todo si no ha capturado nada por la noche. Pero se lo ha dicho Jesús y Pedro confía totalmente en él: «Apoyado en tu palabra, echaré las redes». Pedro es, al mismo tiempo, un hombre de corazón sincero. Sorprendido por la enorme pesca obtenida, «se arroja a los pies de Jesús» y con una espontaneidad admirable le dice: «Apártate de mí, que soy pecador». Pedro reconoce ante todo su pecado y su absoluta indignidad para convivir de cerca con Jesús. Jesús no se asusta de tener junto a sí a un discípulo pecador. Al contrario, si se siente pecador, Pedro podrá comprender mejor su mensaje de perdón para todos y su acogida a pecadores e indeseables. «No temas. Desde ahora, serás pescador de hombres». Jesús le quita el miedo a ser un discípulo pecador, lo invita a seguir buscando hombres y mujeres de fe para seguir el camino de Jesús, pescando obras para los más necesitados.
  2. Una Misión de Amor: El Evangelio de San Lucas nuevamente nos enseña como Jesús les da valor  a sus discípulos y los acompaña en sus trabajos, Dios nos acepta y nos ama buscando en cada corazón una fe viva de amar, perdonar,  No hay lugar, hora o fecha para buscar de corazón a Jesús que nos invita a trabajar por un mundo más humano y consiente de la cruz que cada uno llevamos. Dios nos ama porque es Amor y no puede ser de otra manera. Y nosotros somos buenos dejándonos transformar por ese amor.
REFLEXIÓN 
   El Señor te pide, como pidió a Simón, que le ayudes a propagar el Evangelio, porque hay que dar a conocer a Dios, a Jesús, y el Evangelio es esta Buena Nueva de la fe. Todos necesitamos de todos, y sin Dios no podemos vivir. Todos necesitamos de la Bondad de Dios para ser alguien, para sentirnos alguien, y cuando los que tienen a Dios en sí mismos por recibirlo en la Comunión, sirven a los demás, dan bondad, su bondad teniendo a Dios, los demás notan a Dios, reciben la bondad de Dios que nosotros damos por los méritos de Dios mismo que vive en nosotros y nos hace buenos, santos.La fe cristiana solo se despierta cuando las personas descubren el fuego de Jesús. Cada uno busca a Jesús en su corazón con obras buenas. 
   A pesar de nuestra mediocridad y nuestro pecado, Dios no deja de ofrecerse y comunicarse. No se retira de nosotros. Nuestro pecado no destruye su presencia amorosa. Sólo impide que esa presencia nos vaya liberando y construyendo como personas. Dios sigue ahí, sosteniendo y alentando nuestro ser con amor, respetando totalmente nuestra libertad, llamándonos silenciosamente a una vida más plena y santa.

PARA LA VIDA

   Hoy te regalo una invitación pero es para un corazón valiente hay que tomar una decisión  es para aquel que anhele vivir una vida con propósito y significación, una vida de valor, una vida que vale la pena vivir...
·        Esta decisión la debes que tomar con el corazón y con convicción...
·        Esta decisión será para siempre...
·        Esta decisión te dará la victoria en todas las cosas. Esta decisión te salvara...
·        Debemos tomar la decisión de dejar lo que nos destruye, lo que no me hace feliz, o lo que creo que es bueno para mí pero no lo es...
·        Debemos tomar la decisión de amarnos y amar al prójimo para siempre...

   Si decidimos amarnos y amar a los demás con amor genuino, debemos por consecuente tomar la decisión de amar a Dios por sobre todas las cosas. Si tomas la decisión de amar a Dios nuestro creador, tu vida será transformada por Él y todos los males desaparecerán de ti, ya no sentirás soledad, tendrás esperanza, paz, alegría, tu vida será de bendición para otros, tus problemas tendrán solución, tendrás fuerzas del cielo, no te faltará nada y nada te será imposible...Tomar la decisión de seguir a Dios es lo más hermoso que te puede pasar, es un privilegio, un regalo eterno...sigamos con Jesús a lado todo es felicidad.